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miércoles, 3 de agosto de 2016

La composición de los evangelios según El Libro de Urantia

Las fuentes de la cuarta parte de El Libro de Urantia
El escritor de la cuarta parte de El Libro de Urantia ha sido un único ser, un ser intermedio secundario que tuvo bajo su custodia al apóstol Andrés (LU 121.0), que ayudado por una comisión de otros once seres intermedios y por un Melquisedec, pusieron por escrito esta parte.
Como fuentes para escribirla, el ser intermedio se apoyó en las siguientes:
-Sus propios recuerdos de cuando asistió al apóstol Andrés, y los recuerdos de otros seres celestiales (LU 121.8:1).
-Los escritos perdidos de Andrés (LU 121.8:1). Curiosamente, he encontrado que efectivamente debió de existir un evangelio según Andrés, del que la wikipedia se hace eco (http://en.wikipedia.org/wiki/Gospel_of_Andrew ), y del que no nos ha llegado nada en absoluto.
-Conceptos o expresiones humanas de dos mil autores humanos, que han vivido desde la época de Jesús hasta el momento en que se escribe la cuarta parte de El Libro de Urantia. Parece que incluso algunos de estos autores todavía vivían en la época en que se escribe (LU 121.8:13). Estos conceptos e ideas afirma que se han utilizado de tal forma que si era necesario se han modificado para que el concepto resultase más veraz.
-Los cuatro evangelios ya existentes (LU 121.8:1).
Datos de El Libro de Urantia acerca de la composición de los evangelios
En cuanto al proceso de formación de los evangelios, El Libro de Urantia describe una serie de escritos, que fueron apareciendo unos bajo la influencia de otros y de diferentes autores. La lista sería la siguiente:
  • Evangelio original de Marcos (LU 121.8:3): fue escrito por Juan Marcos, que fue colaborador de Pedro en Roma y era hijo de Elías Marcos, el dueño de la casa donde Jesús celebró la última cena. En realidad, este evangelio fue patrocinado por Pedro. Marcos lo escribió entre el año 67 y 68. Al terminarlo, la última quinta parte se destruyó. Este evangelio, sin esa última parte, es el que podríamos denominar Evangelio original de Marcos. El Libro de Urantia dice que Marcos se basó enteramente en sus recuerdos personales y en los recuerdos de Pedro. No se basó en ningún otro escrito previo.
  • Evangelios basados en el de Marcos (LU 121.8:3): fueron modificaciones del original de Marcos, sobre todo quitando pasajes y añadiendo material a la parte final en blanco. Resulta curioso que desde hace bastante se viene hablando de un Evangelio secreto de Marcos, descubierto en 1958 en una supuesta carta de Clemente de Alejandría (http://es.wikipedia.org/wiki/Evangelio_secreto_de_Marcos ). En mi opinión, esta carta está hablando de ejemplares de algunos de estos evangelios basados en el original de Marcos.
  • Evangelio actual de Marcos: es uno de los evangelios basados en el Evangelio original de Marcos, que finalmente consiguió el visto bueno de la Iglesia y fue aceptado como el correcto.
  • Notas originales de Mateo (LU 121.8:5): Mateo tomó notas durante la vida de Jesús de muchos de sus dichos (LU 139.7:5), y también justo después de morir Jesús (LU 121.8:5). Estaban escritas en arameo. En mi opinión sirvieron de base para otros escritos pero nunca llegaron a conservarse por sí mismas hasta nuestros días.
  • Evangelio de Mateo en arameo (LU 121.8:6): es un evangelio que se escribió en el año 40 (El Libro de Urantia no dice quién fue el autor) y que fue una ampliación y corrección de las Notas originales de Mateo. Al parecer fue un documento personal que alguien poseyó o bien diseminó muy poco, y el último ejemplar se destruyó en un incendio de un monasterio sirio el año 416. En mi opinión este es el evangelio que los expertos llaman el Evangelio de los hebreos, del que sólo nos han llegado citas (http://es.wikipedia.org/wiki/Evangelio_de_los_hebreos ).
  • Evangelio de Mateo en griego (LU 121.8:7): fue escrito por un discípulo de Mateo, llamado Isador, en el año 71, en Pella, en el Jordán. Para ello utilizó, según El Libro de Urantia, sólo los recuerdos de Mateo, las notas originales de Mateo, y el Evangelio original de Marcos. En mi opinión también utilizó las Notas modificadas de Andrés.
  • Evangelio actual de Mateo: es el resultado de sucesivas modificaciones del Evangelio de Mateo en griego hasta que finalmente fue fijado tal y como hoy lo conocemos.
  • Artículo de Cedes (LU 121.8:9): Cedes fue un creyente de Antioquía que el año 78 escribió este artículo. El Libro de Urantia no menciona su contenido. No he encontrado constancia del tal escrito por ningún lado.
  • Notas de Andrés (LU 139.1:9): Andrés las escribió justo después de ser crucificado Jesús. Copias de este documento circularon durante un tiempo entre las comunidades cristianas.
  • Notas modificadas de Andrés (LU 139.1:9): son las Notas de Andrés a las que progresivamente se les fueron haciendo modificaciones para intentar que pareciera un evangelio.
  • Evangelio de Andrés (LU 139.1:9): es el documento en que acabaron convertidas las Notas modificadas de Andrés, tras diversas adiciones y correcciones de diferentes autores. El último ejemplar fue destruido en un incendio en Alejandría unos cien años después de que Andrés escribiese el original. En mi opinión, este evangelio es el que los expertos denominan también Evangelio de Andrés(http://en.wikipedia.org/wiki/Gospel_of_Andrew ), del que sólo nos han llegado menciones, y que erróneamente se considera idéntico al llamadoHechos de Andrés, y también es, en mi opinión, el llamado por los expertos Documento Q (http://en.wikipedia.org/wiki/Q_document ), llamado así por considerarse la fuente original de Mateo y Lucas, y del que no nos ha llegado ningún ejemplar, y tan sólo se ha regenerado a base de analizar los evangelios actuales.
  • Evangelio de Lucas (LU 121.8:9): escrito por Lucas, un discípulo de Pablo, de Antioquía de Pisidia. Lo escribió en el año 82 en Acaya. Se basó para escribirlo en las enseñanzas de Pablo, en decenas de testigos de la vida de Jesús, en el Evangelio original de Marcos, en el Evangelio de Mateo en griego, en el Artículo de Cedes, y en las Notas modificadas de Andrés.
  • Evangelio actual de Lucas: es el resultado de algunas modificaciones que se hicieron al Evangelio de Lucas.
  • Hechos de los apóstoles: segunda parte que escribió Lucas de su evangelio. Su intención era escribir una tercera parte, supongo que relatando los avatares de Pablo y Pedro en Roma, pero Lucas murió antes de terminar los Hechos.
  • Escrito apocalíptico de Selta (LU 176.2:8): Selta fue un empleado de la corte de Calígula que escribió este artículo sobre el Mesías y la parábola de las diez vírgenes. En el siglo II, los evangelios de Mateo sobre todo (Mt 24-25), y algo el de Marcos (Mc 13) y Lucas (Lc 21), fueron ampliados para incluir una versión modificada de este escrito de Selta como si fuera un discurso pronunciado por Jesús sobre el fin de los tiempos . Éste fue, al parecer, la mayor modificación que sufrieron estos evangelios de forma espuria, y tergiversaban notablemente las auténticas enseñanzas del Maestro sobre este tema.
  • Primera epístola de Pedro (LU 139.2:12). Fue escrita por Pedro mismo, aunque la versión actual es una modificación de la original por parte de un discípulo de Pablo.
  • Evangelio original de Juan (LU 121.8:10 y LU 139.4:15): lo escribió Natán de Cesarea, un discípulo de Juan, el año 101, en Éfeso de Asia (Juan fue extraordinariamente longevo). Natán se basó en los recuerdos de Juan y en todos los otros documentos existentes. En mi opinión, la originalidad de contenido de este evangelio, que muestra detalles que los otros tres evangelios actuales no muestran, es prueba de que había otros evangelios y escritos que contenían también mucha información valiosa.
  • Evangelio actual de Juan: el evangelio original fue muy modificado con el paso del tiempo para que pareciera que lo había escrito Juan mismo. Es muy probable que el llamativo Prólogo, por ejemplo, fuera una adición posterior.
  • Apocalipsis original de Juan (LU 139.4:14): lo escribió Juan durante un exilio en Patmos. El original era mucho más extenso que el libro actual.
  • Apocalipsis actual de Juan: es una versión del original, en la que se suprimieron grandes porciones y se modificaron otras.
  • Primera epístola de Juan (LU 121.8:10): fue escrita por Juan mismo como explicación del trabajo que había hecho Natán. Sin embargo, no se aprecia en esta carta indicio alguno a esto, como una mención a Natán o a su evangelio.
  • Notas de Tomás (LU 139.8:12): Pocas semanas antes de morir Tomás empezó a escribir un evangelio. No está claro para mí si este documento es el actual Evangelio de Tomás de los expertos (http://es.wikipedia.org/wiki/Evangelio_de_Tomás ). En mi opinión este texto utiliza el incipiente escrito de Tomás, pero luego añade muchos supuestos dichos de Jesús de tipo gnóstico que no formaron parte del escrito original de Tomás. El documento final es muy del gusto gnóstico, con sentencias enigmáticas y de doble sentido.
Existen muchos otros libros llamados en la literatura cristiana apócrifos, como luego veremos, pero basta echarles un vistazo para advertir que ya no se trata de documentos relacionados con la vida de Jesús sino que son leyendas sobre Jesús (sobre todo sobre su nacimiento), historias paralelas o derivadas de los evangelios, o bien elucubraciones pseudo-místicas. Nada hay ya de valor en estos escritos, pues las fuentes originales se agotan con los anteriores.
La teoría de las dos fuentes
En mi opinión es correcta, y El Libro de Urantia se ajusta a ella. Básicamente lo que dice esta teoría de los expertos es que tanto Mateo como Lucas utilizaron para escribir sus evangelios una doble fuente, una que nos es conocida, el evangelio de Marcos, y otra totalmente enigmática, de la que no tenemos noticia alguna, y que los expertos han bautizado como documento Q. De este modo se explicarían las coincidencias entre Mateo y Lucas que no están relatadas en Marcos.
Pero antes deberíamos decir que en El Libro de Urantia nos falta una mención que diga que Isador escribió el Evangelio de Mateo en griego utilizando también como fuente a las Notas modificadas de Andrés, al igual que hizo Lucas. Es lo lógico si pensamos que se nos cuenta que Isador se trasladó de Jerusalén a Pella (LU 121.8:7). Isador debió de conocer a Andrés, que seguramente también vivió en Jerusalén junto a Pedro por un tiempo. Por tanto, Isador debió de tener acceso a los escritos de Andrés, las Notas de Andrés o bien una de sus versiones modificadas.
Siguiendo con la teoría de las dos fuentes, el que los expertos llamandocumento Q, no sería otro, según El Libro de Urantia, que los escritos perdidos del apóstol Andrés, las Notas modificadas de Andrés.
Consideraciones acerca del proceso de composición de los evangelios
Como podemos apreciar el número de evangelios que se escribieron fue muy bajo. La razón que da El Libro de Urantia es que la primera generación de discípulos (los apóstoles), siguieron muy fielmente la idea que les inculcó Jesús de que no consignaran sus enseñanzas por escrito.
La segunda generación de discípulos ya fue otra cosa. Es curioso notar que todos los evangelistas en realidad fueron escritores de la segunda generación: Marcos en realidad fue seguidor de Pedro, aunque conoció algo a Jesús; Isador fue discípulo de Mateo y el auténtico escritor del evangelio de Mateo; Lucas fue seguidor de Pablo, quien además no conoció a Jesús; y por último Natán, el escritor del cuarto evangelio, fue el discípulo de Juan Zebedeo.
Pudieron haber llegado a ser seis los evangelios. Está claro que nos falta elEvangelio de Andrés, que no es ni más ni menos que una versión ampliada de lo que hoy los expertos llaman el documento Q, y que seguramente contenía muchos pasajes inéditos de la vida de Jesús que ningún otro evangelio mencionaba. Y también nos falta el Evangelio de Tomás, pero este no porque tuviera la desgracia de ser destruido, sino sencillamente porque Tomás murió antes de llegar a terminarlo. Lo único que nos ha llegado de él son algunos dichos, seguramente muchos de los cuales fueron escritos ciertamente por Tomás, que es lo que los expertos hoy denominan el Evangelio de Tomás.
De los cinco evangelios que finalmente tenemos se aprecia claramente algo notable: prácticamente la historia que se cuenta sigue un esquema o patrón único. El único evangelio que de verdad se muestra muy original y fuera de ese patrón es el Evangelio de Juan. Esto nos ofrece un panorama deplorable para tratar de obtener una visión plural de la vida de Jesús. Realmente lo que tenemos en los cinco evangelios es como mucho una visión dual.
Básicamente los relatos sobre la vida de Jesús se compusieron siguiendo estas etapas:
  1. Durante su vida o justo al morir Jesús tenemos unas notas tomadas por Mateo y Andrés. Serían básicamente frases y dichos de Jesús, algunos discursos.
  2. Algunos discípulos incrementan estos escritos añadiendo pequeños relatos relacionados con Jesús. Se forman los evangelios que no han llegado a nuestros días, como eldocumento Q (en realidad el documento Q fue el proto-evangelio de Andrés, que yo llamo las Notas modificadas de Andrés) o elEvangelio de los hebreos, que yo llamo Evangelio de Mateo en arameo. Estos escritos circularon de forma muy limitada y seguramente contenían muchas imprecisiones pues no figuraron nunca bajo el patrocinio de un apóstol importante, de ahí que su denominación fuera “de los hebreos” y similar (nazarenos, ebionitas). Posteriormente estos escritos fueron tildados de incorrectos y se les marginó hasta que desaparecieron. Llama la atención el hecho de que el Evangelio de Andrés, el auténticodocumento Q según creo, y que tuvo tanta influencia posterior, haya terminado como una mera mención y no se preocupara nadie de preservar más ejemplares, hasta el punto de desaparecer. ¿Acaso su contenido no debió de ser sumamente inédito e importante?
  3. Empiezan a escribirse los evangelios. El primero en escribirlo es Marcos. Él fue quien estableció el esquema o modelo para todos los evangelios posteriores (bautismo-predicación-pasión en Jerusalén). Es curioso que El Libro de Urantia dice que Marcos se basó enteramente en recuerdos personales y de Pedro, cuando pudo tener a su disposición las notas de Andrés y Mateo, o los evangelios surgidos a partir de estas notas. Este hecho es algo que los exégetas ya han observado en Marcos. Marcos parece tener una originalidad única, y ser el primer evangelio en escribirse, mientras que Mateo y Lucas parecen copiar a Marcos y también de otra fuente.
  4. Mateo y Pablo patrocinan sus evangelios (el de Mateo y Lucas). Estos escritores escriben evangelios mucho más completos, pues no sólo utilizan el modelo de Marcos, sino que incorporan más material. Mucho de ese material proviene de la notas de Andrés (El Libro de Urantia no lo dice pero estoy convencido de que Mateo utilizó las notas de Andrés también). Sin saberlo, al leer los evangelios de Mateo y Lucas estamos leyendo el perdido evangelio de Andrés. Este evangelio perdido creo que es lo que los expertos denoniman el documento Q, y que explicaría las semejanzas entre Mateo y Lucas que no se encuentran en Marcos (la teoría de las dos fuentes). Sin embargo, a pesar de que estos evangelistas añadieron muchos pasajes nuevos que no estaban en Marcos, y nos dieron una perspectiva mayor y mejor de la vida de Jesús, en el fondo siguen muy fielmente el esquema de Marcos. Por ejemplo, un hecho llamativo de estos tres evangelios (se les llama sinópticos por lo mucho que se parecen), es que toda la predicación de Jesús parece transcurrir a lo largo de sólo un año. Como apenas hay menciones cronológicas, no parece claro cuánto dura la vida pública de Jesús.
  5. Tomás empieza a escribir su evangelio, y empieza como Andrés y Mateo con unas notas con dichos y frases de Jesús. Pero muere poco después y su intención de escribir otro evangelio queda en nada. Algunos discípulos amplían y ponen por escrito estas notas de Tomás, y ése es el evangelio de Tomás que hoy tenemos. Los expertos han comprobado que hay muchas frases inéditas de Jesús en este escrito que no están en Marcos, Mateo ni Lucas, lo cual demuestra que fue un escrito original de Tomás, basado sólo en sus propios recuerdos. Lamentablemente, nunca sabremos cómo hubiera sido el evangelio que este apóstol habría llegado a escribir. ¿Se habría basado en los otros tres o habría sido una historia original?
  6. Un autor desconocido amplia las notas de Andrés y las convierte en un evangelio. Seguramente utilizó mucho material de los otros tres evangelios, con lo que este evangelio al final parecería una copia de los otros, aunque con una enorme originalidad derivada del hecho de que utilizaba una fuente con mucho contenido importante. Que este evangelio debió de ser importante en su contenido para conocer a Jesús se deriva del hecho de que la cuarta parte de El Libro de Urantia está basada en gran medida en este evangelio, del que los seres celestiales tienen copia. ¡Qué pena más grande que este evangelio, por desgracia, fue destruido! ¡Cuántas más cosas habríamos sabido sobre Jesús! El último ejemplar en existencia se quemó, según El Libro de Urantia ( LU 139.1:9), unos cien años después de escribirse el original (año 30). Parece que pudo ser durante la guerra de los Kitos, en el año 115 al 117, cuando se produjo este desafortunado hecho (http://es.wikipedia.org/wiki/Guerra_de_Kitos ), pues aquí se fecha una revuelta judía que se extendió a Alejandría, y en la cual los judíos quemaron muchos edificios alejandrinos. Curiosamente, fueron los judíos, quienes finalmente, terminaron con este evangelio.
  7. Por último, Juan escribe su evangelio, con la clara intención de narrar episodios de la vida de Jesús que no se habían contado y de ofrecer, en su opinión, una visión más clara y exacta de algunas palabras de Jesús. La cantidad de detalles que Juan ofrece sobre la última cena no tienen equivalente en otros evangelios. Y hay muchos milagros que ninguno otro contó, como el de Caná. Está claro que los evangelios sinópticos representan un esquema en el relato de la vida de Jesús (que incluye dos fuentes, a Marcos y a Andrés), pero gracias a Juan tenemos una segunda visión distinta y original sobre Jesús.
Los otros evangelios que los expertos llaman apócrifos
Existen muchos otros escritos, aparte de los que ya se han mencionado aquí, que a veces se denominan evangelios, que pertenecen a esos escritos que en el cristianismo se llamaron apócrifos. Sin embargo, es muy incorrecto llamarlos evangelios. La mayor parte de ellos no siguen el esquema real de un relato sobre toda la vida de Jesús (desde su nacimiento hasta su muerte y resurrección), con notable cantidad de dichos y enseñanzas sobre él. Básicamente estos escritos son extensiones de los evangelios ya existentes, o bien literatura pseudo-mística de la época, y ninguno alcanza su redacción a una fecha como el siglo I, todos son del siglo II o posteriores. En mi opinión, toda esta literatura son puras especulaciones de escritores del siglo II que intentan rellenar lagunas, y por desgracia, no hay nada en ellos que nos ofrezca datos inéditos sobre la vida de Jesús.
Una lista de estos escritos, excluyendo los apócrifos que ya han sido mencionados arriba, podría ser la siguiente:

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