El Libro de Urantia dice:
44:8.3 (508.1) Aunque los Dioses no otorgan arbitrariamente talentos y habilidad a los hijos del tiempo, sí proveen el logro de la satisfacción de todos los anhelos nobles y la gratificación de todo apetito humano de autoexpresión excelsa.
44:8.2 (507.7) Existen tres fuentes posibles de esta habilidad humana especial: de base siempre existe la aptitud natural o inherente. La habilidad especial no es nunca un don arbitrario de los Dioses; siempre existe un cimiento ancestral para cada talento sobresaliente. Además de esta habilidad natural, o más bien suplementaria a la misma, puede existir la contribución de la guía del Ajustador del Pensamiento en aquellos individuos cuyos Ajustadores residentes puedan haber tenido experiencias reales y auténticas en líneas semejantes en otros mundos y en otras criaturas mortales.
155:1.4 (1726.1) «En todo lo que hacéis, no os volváis dogmáticos y superespecializados.
44:8.2 (507.7) Existen tres fuentes posibles de esta habilidad humana especial: de base siempre existe la aptitud natural o inherente. La habilidad especial no es nunca un don arbitrario de los Dioses; siempre existe un cimiento ancestral para cada talento sobresaliente. Además de esta habilidad natural, o más bien suplementaria a la misma, puede existir la contribución de la guía del Ajustador del Pensamiento en aquellos individuos cuyos Ajustadores residentes puedan haber tenido experiencias reales y auténticas en líneas semejantes en otros mundos y en otras criaturas mortales.
155:1.4 (1726.1) «En todo lo que hacéis, no os volváis dogmáticos y superespecializados.
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